Pensaba ir a Caracas pero…

La Autopista Regional del Centro colapsó de nuevo en el kilometro 34+500, esta vez no hay un mega hueco sino una falla de borde. Crónica anunciada mis queridos lectores, pues en declaraciones de la presidenta del Instituto de Vialidad de Miranda (Invitrami), Carmen Vásquez recogidas en el Universal, donde ésta explica que “a raíz del «megahueco» en el kilómetro 37, se llevó a cabo una serie de pruebas de terreno a lo largo de la autopista para verificar dónde se presentaban otros problemas que pudieran causar un nuevo colapso en este corredor vial» y además dijo que «el punto más crítico es el del kilómetro 34+500, que es donde se presenta la falla geológica», dijo Vásquez al señalar que desde este fin de semana (7-8/10) se apostaron las máquinas que «están abriendo la pica para ubicar el equipo especial que va a realizar las perforaciones».

Si hicieron el estudio y esa zona estaba apunto del colapso, por qué no empezaron las reparaciones desde ese momento, por allí da miedo pasar, pues la falla ha afectado más de 200m a lo largo de la autopista obstaculizando el transito por el canal lento. La falla de borde es crítica y en cualquier momento puede ceder más aún con las lluvias que últimamente han azotado a la zona.

Yo quisiera saber por qué no poseemos en nosotros, (no se como llamarla exactamente pero voy a calificarlo como un hábito) “hábitos” de mantenimiento preventivo, generalmente inauguramos la obra, pasa un par de años bonita y luego la tiramos al olvido y bien gracias, nos acordamos de ella cuando se cae o cuando esta a punto de ocasionar una desgracia o lo que es peor cuando ya tenemos la tragedia encima.

No culpo en parte a este gobierno, nos culpo a nosotros mismos… que no tenemos hábitos de nada, no se si es falta de cultura, educación o que se yo, pero tenemos que empezar con nuestros hijos a ver si podemos criar a una generación diferente donde los individuos a la vez que se cuidan a si mismos también sean capaces de preservar su entorno. Tenemos otro chance, eduquemos a los que nos siguen, por lo menos así podremos decir que hicimos algo que valió la pena para dejar de herencia.